Hoy vamos a hablar de mermeladas...
Primero les cuento que me decidí a hacer esta mermelada porque me regalaron dos bolsas enormes de naranjas (ventajas de vivir frente a huertos de naranjos, jejeje!), así que no podía dejar pasar la oportunidad de aprovechar estas naranjas y comer mermelada casera!
Si puedo hacer mermelada en casa, mejor, ya que no llevan ningún aditivo ni conservante como las que compramos en el supermercado.
Como dice Cristina Galiano en su escuela de cocina:
"Si cuidáis vuestra salud escoger mermeladas que solo lleven en su composición fruta, azúcar, pectina (que es un espesante natural) y ácido cítrico como conservador. Muchas llevan añadidos más aditivos, por supuesto todos autorizados, pero que no dejan de ser “sustancias extrañas” para nuestro organismo con un posible efecto acumulativo.
Y aunque los fabricantes alegan que los añaden para que tengan una fecha de caducidad más larga, no deja de ser “un cuento” ya que las mermeladas realmente naturales, sin conservantes ni colorantes duran muchísimo."
Esto de que duran muuuucho, 1 año por lo menos (con todos los pasos de conservación cumplidos) lo sabía por mi abuela, que hacía todo tipo de conservas con frutas y verduras de estación. Pero nunca está demás aprender cosas nuevas y saber porqué a veces es mejor "hacer en casa" que comprar hecho.
Lo primero que tuve que hacer, antes de ponerme manos a la obra con esta mermelada fue investigar sobre como hacer una mermelada de naranjas que fuera de sabor dulce ya que las que había probado, tanto caseras como compradas, eran amargas y no me gustan. Y así leyendo de aquí y de allá dí con la manera de hacer "Mi Mermelada Dulce de Naranjas". El secreto no era nada más ni nada menos que quitarle toda la parte blanca, sin dejar ni una pizca!
La verdad es que es un poco laborioso y hay que armarse de paciencia pero el resultado merece